06/11/2020

En mis recuerdos ya no estás. Es decir, sí, 

Te sigo recordando, pero, ya no te siento

presente. Va un año que me dijiste que

No querías estar más a mí lado, de aquel

Mes que vivimos juntos sin estar juntos,

De no querer que te tocara, sin embargo,

De pedirme un abrazo cuando estabas triste.

Un año y medio pasó desde mi agresión, casi 

Cuatro años del día en que te dije te amo. 

Ahora estoy, me siento melancólico, triste

A veces. Pensé que todo era un infierno porque

Perdí todo, pero estuve ciego. 

En enero fui a la sierra, donde pude ver el claro de

Luna en su inmensidad, convivir con mis amigos

O’dam y superar nuestra relación. Como me dijeron

Aquella vez, el dolor desapareció, es decir, ya no es

El mismo. Así, cada vez, se hace más claro a mi 

Entendimiento que el yo, así como la contingencia,

No se sigue causalmente. En febrero perdí todo, me

Encerré en mi habitación a llorar-te, arrepentido por

Existir, por conformarme en la práctica como un agresor.

En marzo, salí de mi habitación a recordar aquellas viejas

Épocas donde era el diablo, con un tridente que se compuso

De cocaína, mota y cuerpos. Aunque la verdadera razón de

Mi existencia era robarme almas, lo que sea que eso

signifique. Así, comencé a ver viejos amigos que me

Acogieron y me ayudaron a continuar con mis prácticas 

Intentando deconstruirlas. En ese momento decidí no tener

Género, pues, no quería reproducir las relaciones de poder

Que nos constituyen. 

En abril el mundo colapsó, como si éste fuese mi corazón.

Por supuesto, es difícil separarse de nuestras relaciones

Imaginarias. Amplié mi mundo, pero seguí trabajando. 

En mayo comencé a salir con la persona que más me

Obsesionó algún día. Es difícil saber si eso es amor. Pero,

Aprendí a amarla de otras formas que no son las condiciones

Que nos impone la sociedad. Nunca me sentí más atrapado,

Aunque, en realidad, era lo más libre que fui alguna vez. Nos

Amamos por un par de meses, nos curamos juntos del desamor.

En drogas nos hicimos uno y otro y otro, seguimos amando a otras

Personas. Nuestro destino, nuestra decisión fue no seguir juntos. 

En agosto recuperé algo de lo que perdí cuando te fuiste. En septiembre

Me levanté de mi mierda. En octubre me volví a caer pero me sentí fuerte,

Con voluntad de conquistar a aquellos que nos conquistaron. 

En noviembre morí con mis dos hermanos, no de sangre. Los amé, los sentí,

vi sus problemas, sentí sus inseguridades, olí sus miedos, reviví su dolor, lo 

Hicimos juntos. En el ocaso del claro de luna, a la orilla de la playa, incrustados

En la vóragine del vaivén del mar, chocando contra todo, morimos para revivir.

O quizás estemos muertos. Es decir, el día que te fuiste me morí, así como el día

Que murieron aquellos a los que tanto amé. Morí con ellos a lo orilla de la playa,

Bajo los efectos de una canción que representa, ahora, un nuevo nacimiento. 

El día 06/11/2020 nací nuevamente, así como hice todo este año. Los abrazos,

El dormir juntos, los regaños, los consejos, los desperdicios, los errores, la 

Preocupación que juntos pasamos hicieron que fuéramos uno solo, como si

De un hombre, una mujer, una no constitución fuese. Aquí entendí que el amor

No es lo mismo que la pasión, aunque, la pasión sí desemboque en amor. De

Nuevo, tuve que separar los enunciados que rodearon a un concepto para entender

Las prácticas alrededor de ello, para no dar saltos en mi pensamiento. Pero, sí, los

Amo con pasión, con lujuria, con todo mi corazón. Paulina no estás presente más,

No estás en mí más, no en mi cuerpo, ni en mi mente. Ahora, al igual que yo, seguirás 

Por siempre en el discurso, donde nos encontraremos. 

El cielo impuso su magnanimo y pérfido tamaño en mí, así, de esta manera, entiendo

Que no soy nada. Y así quiero seguir. No quiero el protagonismo, no quiero ser parte

De un sujeto que camina solo. Mi deseo es simple: la revolución. Por eso, nuevamente,

Estoy de regreso en el camino que recorro desde aquel día que nací, la primera o la segunda

vez. El viento, la lluvia, el sol, el frío, la vida me golpea pero yo estoy muerto, fundido en

La nada del conocimiento humano, pero, sobre todo, en el amor, la pasión, la lujuria, el deseo

De la humanidad.Aunque también estoy en lo peor de todos nosotros. De cada parte, relativa a ella 

estoy performativamente, es decir, no soy,

No estoy, no vivo. 

¡Estoy muerto! con ilusión de vivir nuevamente.